domingo, 30 de enero de 2011

Irene tiene un recuerdo en almíbar.

Dicen que hay por ahí quien es capaz de aguantar la respiración hasta 3 minutos y pico, yo una vez lo intenté, no sobrepasé el minuto. Pensé que sería porque me agobio fácilmente, porque soy muy nerviosa o porque simplemente porque fumo, pero realmente, no puede ser, porque yo no me suelo agobiar ni tampoco fumo… y me pregunté, si los que conseguían aguantar tanto tiempo sin respirar, era porque no tenían esa sensación de agobio al no rellenar los pulmones de aire o simplemente eran tan estúpidos que querían ver quién era el que aguantaba mayor tiempo cambiado progresivamente de color hasta llegar a un morado. A ver, seamos realistas y coherentes es muy poco probable que alguien muera por aguantar demasiado tiempo la respiración, es evidente, ya que respirar es una acción inconsciente. Es algo que no se puede evitar. Es cosa del organismo. Lo necesitamos, de una forma u otra el cuerpo nos pide volver a recargar los pulmones de aire. Bien pues, aguantar al respiración demasiado tiempo y querer a alguien es más o menos lo mismo, ambas te matan a la larga, de una forma u otra. Pero la ventaja de aguantar la respiración frente a querer a alguien, es que en el momento que lo necesitas puedes coger aire nuevamente y te recuperas en veinte segundos más o menos, mientras que cuando has querido a alguien tanto como yo le quise, no es tan fácil recuperarse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario